Enseñanza incidental

Enseñanza incidental

La enseñanza incidental es una estrategia que utiliza los principios del análisis del comportamiento aplicado (ABA) para proporcionar oportunidades de aprendizaje estructurado en el entorno natural utilizando los intereses y la motivación natural del niño. La enseñanza incidental se utiliza cuando se trata de mejorar las habilidades lingüísticas y de comportamiento. La enseñanza incidental suele utilizarse con niños de 2 a 9 años, pero es adecuada para personas de cualquier edad que sean autistas o tengan retrasos en el desarrollo. La enseñanza incidental ayuda a los niños a encontrar su voz interior.

Pasos para la enseñanza incidental

  • Siga las indicaciones del niño: Para aprovechar al máximo este método, es importante que el adulto entienda al niño, su comportamiento natural y sus intereses. Utiliza el juguete que le interesa para enseñarle los colores en lugar de quitarle el juguete y utilizar en su lugar tarjetas de colores.
  • Atención: Asegúrese de tener la atención del niño, de lo contrario no obtendrá una respuesta del niño y sus esfuerzos serán en vano. Es importante ponerse a la altura de los ojos y estar cara a cara, así el niño sabrá que se espera algo de él.
  • Cree el entorno adecuado: Utiliza accesorios, materiales y actividades que inciten al niño a iniciar la conversación. Asegúrese de que estos materiales y actividades sean de interés para el niño. A continuación, coloca los objetos fuera de su alcance. Esto creará una oportunidad en la que el niño tendrá que comunicarse verbal o no verbalmente para pedir el objeto que desea. Cuando el objeto está fuera de su alcance, el niño se ve obligado a pedir ayuda al adulto para conseguir el objeto que desea, como un juguete o un libro.
  • Retraso en el tiempo: Deja que sea el niño quien inicie la petición. Las interacciones las inicia el niño, no el adulto.
  • Modelar la respuesta correcta: Si el niño no toma la iniciativa, el adulto le ayudará modelando la respuesta correcta diciendo la palabra del objeto que quiere el niño, como "¿Libro?". Otro método consiste en proporcionar al niño señales no verbales, como señalar un objeto, para ayudarle a iniciar un movimiento. Este método suele ser el más eficaz para los niños con autismo.
  • Ofrezca un refuerzo positivo: Cuando el niño responda correctamente, recompénsele con el acceso al objeto o la actividad solicitada. Entrégale el libro que quiere.

Beneficios de la enseñanza incidental

Poner la responsabilidad en el niño, le permite desarrollar su voz interior y no ser un espectador. El adulto está guiando al niño para que dé su primer paso en el aprendizaje. Una vez que el niño se sienta cómodo con sus habilidades lingüísticas, podrá empezar a interactuar más con sus compañeros. Esto le animará a adaptarse y a comunicar sus necesidades en diversos entornos, lo que le ayudará a poner en práctica sus nuevos conocimientos y habilidades.

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